Después de años
de giras, Florence Welch se tomó 2014 como un año de descanso para dar forma a
su siguiente disco. Pero, según ha confesado, lo que debía ser un tiempo de
relax acabó convirtiéndose en un periodo de autoconocimiento. “Sin una agenda
de conciertos, tienes que enfrentarte a tu propio caos”, ha admitido. Eso la
llevó a reflexionar sobre una relación llena de idas y venidas y sus malos
hábitos con el alcohol, entre otros. Fruto de ello es How Big, How Blue, How
Beautiful, un álbum introspectivo en el que Florence aborda su vida privada sin
recurrir al barroquismo lírico y a la evasión de Ceremonials. Este ligero cambio en las letras se ha
extendido al sonido del grupo, menos recargado respecto a lo que nos tenían
acostumbrados.
Que How Big, How Blue, How Beautiful sea un disco más personal no significa
que sea un disco acústico. Las guitarras priman en Ship To Wreck, pero sigue
teniendo uno de esos estribillos marca de Florence. Y What Kind Of Man, tras
una fantasmal introducción, nos muestra el lado más rockero que jamás le
hayamos oído a la cantante. Este agresivo y catártico número le sirve a
Florence para sacar todo su dolor por esa tormentosa relación de la que habla.
Es, sin duda, una buena muestra de esa introspección que hay en el álbum, con
la que la artista no se limita a presentarse como una víctima, sino que
reconoce su parte de culpa en todo aquello que cuenta. “Maybe I have always been more comfortable in
chaos” confiesa en la contemplativa St Jude, una particular oda al patrón de
las causas perdidas.
Por momentos, este trabajo acerca a Florence + The Machine al sonido de una
banda en directo sin demasiados ornamentos, aunque sin perder su sello. Queen
Of Peace juega con las cuerdas y las trompetas, mientras que la liberadora
Delilah (“Cause I’m gonna be
free and I’m gonna be fine”, canta Florence) cuenta con un apoteósico final. No
faltan, no obstante, los excesos propios de la banda, como ese Third Eye en la
línea de Dog Days Are Over o el espectacular clímax final de arreglos
orquestales de la serena How Big, How Blue, How Beautiful.
Entre tanta potencia e
intensidad, Long & Lost y Caught son un bienvenido mar de calma. Al igual
que Various Storms & Saints, una íntima balada cargada de dolor y a la vez
esperanza (Florence se convence de que todo irá bien diciéndose “I know you’re bleeding but you’ll be OK”).
En definitiva, How Big, How Blue, How Beautiful es el reflejo del viaje de Florence
para poner en orden ciertos aspectos de su vida. Es este un disco personal y
casi terapéutico con el que, además, es fácil conectar. Puede que Florence haya
sufrido, pero ha sacado algo bueno de todo ello, algo que nos ofrece para que todos lo podamos disfrutar.
Nota: 8,5
Destacamos: Ship To Wreck, What Kind Of Man, Various Storms & Saints, Delilah
Es un álbum perfecto! Excelente critica! Perfecta redacción!
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